Capitulo 18:

Mi móvil no hacia mas que sonar, una y otra vez, si, sabia perfectamente que era Ele, que ya quería irse a casa. no sabia cuanto tiempo llevaba sentada en ese banco, llorando, joder, ¿por que nos ha pasado esto? ¿que he echo yo? y lo mejor, ¿por que cojones soy yo la que esta sufriendo, cuando ese cabronazo se estará tirando ahora mismo a esa zorra? y seguramente lo este haciendo como si nada hubiese pasado... no me lo puedo creer,  siete meses a la mierda, siete meses desperdiciados de mi vida, en los que creia que le amaba y el sentimiento era mutuo, joder, ¿como he podido ser tan tonta? ¿de verdad pensaba que esto era para siempre? mirate ahora Vanessa, como una niñata que llora porque se le ha caído el helado... esto me pasa por confiar y tener paciencia. A mi edad, deberia saber que el "y vivieron felices y comieron perdices" no existe, ni el príncipe azul ni las hadas madrinas, que esto no es un cuento, que esto es la vida real y que debería haberle dejado las cosas claras desde el principio de la historia...

Tendría que mandarle un mensaje a Ele:

- Ya no estoy en la fiesta, ve yendo hacia casa, yo llegare pronto... -

Por fin en mucho tiempo separe mis piernas del resto de mi cuerpo, las sentía entumecidas y algo dormidas...

mire mi vestido y los bonitos zapatos que calzaba, la verdad es que ya no tiene ningún sentido llevarlos, y por supuesto nada cómodos como para andar hasta mi casa, eso si seria un suicidio... 

mire en mi monedero contando el dinero que tenia, pero era demasiado poco como para coger un taxi, y no estoy segura de que a estas horas halla autobuses ¿que hora es? miro el movil... las doce y media... definitivamente no, no hay autobuses a estas horas... no queda otra, iré andando...

No llore mas, si, seguía doliendo, pero era mas fuerte que esto, no voy a dejar que un imbécil como ese me amargue la vida, cuando ya iba por la ronda de San Bernardo unos tíos con motos empezaron a gritarme, los mire con desprecio y seguí mi camino, aunque uno que, no había entendido la mirada se acerco con la moto y se puso enfrente mía:

- ¿que estas haciendo?

- ¿que pasa, eres una mujer con carácter?

- ¿te importa mucho lo que yo sea?

- ¡menos humos chimenea!

Le ignore y seguí mi camino ¡menudo imbécil...

- ¿que pasa? ¿ya no me conoces o que? - me dijo el a lo lejos

- ¿deberia?

- ¡claro! ¿no te acuerdas? ¡soy Nacho! Nachito el del cole ¿te acuerdas?

- ¡Anda! Pues no te había reconocido

- Ya lo veo

- Vaya ¿tan mal has acabado? ¿bebiendo con los amigos en medio de una rotonda conduciendo motos negras e intimidando a las jovencitas que pasan? por no mencionar la chaqueta de cuero...

- pues tu no has cambiado nada, sigues siendo una repelente pijorra...

- ¿perdon? no, eres tu el que se a presentado delante de mi con unas pintas de macarras increíbles ¿como quieres que te reconozca si cuando estábamos juntos en clase llevabas siempre la camisa metida por dentro de los pantalones?

- ¿lo ves? sigues siendo una autentica pija... pero ¿te acuerdas de cuando "salimos" juntos?

- jajajaja... ¡no me lo recuerdes! ya fue hace mucho tiempo, ¿en segundo? eramos unos críos...

- pero fuimos felices la semana que salimos jajajaja

- si, claro, cuando no estabas cubierto de barro de los pies a la cabeza eramos felices los dos...

- oye yo me preguntaba que, ¿que hace una chica tan linda solita por la calle a la una menos diez de la noche?

- es una larga historia, no tengo dinero para un taxi, y los autobuses ya no circulan, así que no me queda otra que andar hasta casa con estos enormes tacones...

- ¿quieres que te lleve?

- no, mejor quédate con tus amigos que parece que te echan de menos -dije cuando vi que de nuevo nos volvían a gritar

- ¡que les den! vamos, monta

- no tienes por que hacerlo...

- ¡venga, por esa semana juntos! ¿vamos?

Monte en la moto y me sujete con fuerza, en realidad me daban muchísimo miedo, y acabo de recordar que iba sin casco, pero bueno, confiare en que mi amigo sabia lo que hacia...

Llegamos tempranisimo, y me dejo justo enfrente de mi casa, cuando baje le dije:

- oye, ¿me das tu teléfono por si un día queremos volver a recordar viejos tiempos?

- por supuesto, y así me cuentas mas sobre que tal te trata la vida...

- si tu supieras...

Me dio el teléfono, nosotros nos dimos dos besos y se marcho, como ya era tardísimo entre escalando hacia mi ventana, no fue complicado, la verdad es que ya lo había echo mas de una vez, pero solo para escabullirme para hablar con Eleonor "en caso de emergencia" dijimos...

Abrí la ventana con cuidado, Ele estaba en la cama, en cuanto, me escucho entrar encendió la lampara de noche...

- ¿donde has estado? ¿sabes lo preocupada que estaba?

- bueno, ya estoy aquí

- ¿que te ha pasado?

- Bueno, poca cosa, Enrique me ha puesto los cuernos con Miriam, la amiguita de Sandra, los he pillado en el baño de tías dándose el lote y le he cruzado la cara, después me he quedado llorando en un banco detrás de la discoteca hasta que te he enviado un mensaje y poco a poco me he levantado, después, como no tenia dinero para un taxi, me he tenido que venir andando hasta que por San Bernardo me he encontrado con un amigo de la infancia que me a traído a casa en moto y eso básicamente, ha sido mi noche...

- ¡oooh lo siento muchísimo tía!

- no pasa nada, no voy a dejar que un cara dura me haga llorar...

- ya, pero yo se que estas mal

- y lo estoy, pero paso de comerme la cabeza ¿sabes? que le den a el y a la otra guarra y que sean felices juntos...


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See os quiereee!!!!!! <3<3